• A través de 56 imágenes, Jorge Silva nos muestra la arqueología, cultura y vida silvestre de la Selva Lacandona; exhibidas en las instalaciones del MUSAC, del 12 de octubre al 12 de noviembre
San Cristóbal de Las Casas, Chiapas/13 de octubre del 2022.- El Presidente Municipal Mariano Díaz Ochoa, inauguró este miércoles, la Exposición Fotográfica “El Desierto de la Soledad”, Tiempos en una Selva sin Tiempo, del fotógrafo conservacionista Jorge Silva Rivera, quien a través de 56 imágenes nos muestra la arqueología, cultura y vida silvestre de la Selva Lacandona; exhibida en las instalaciones del MUSAC, del 12 de octubre al 12 de noviembre.
En el marco del inicio del XX Festival Internacional Cervantino Barroco, con la presencia de artistas, fotógrafos, Funcionarios Municipales y Estatales, así como de amigos y familiares, el Mandatario Municipal reconoció a Silva Rivera por su gran aportación artística e histórica, a quien calificó como un cazador de imágenes, “son verdaderas obras de arte que retratan parte de la Selva que es espectacular; Jorge siempre está cazando la mejor imagen para que las disfrutemos todos los que aquí vivimos y los que nos visitan de otras partes del mundo. Es un artista sancristobalense que ha dedicado su vida a este arte”.
“Reconocemos esa pasión, responsabilidad, respeto y paciencia con que logra captar cada detalle. Dedica el tiempo suficiente para captar una pequeña parte de la realidad que representa vida, por lo que se va por largas temporadas a vivir y disfrutar de la selva para captar estas imágenes, es un gran equipo que trabaja con él y se internan en la selva, y hoy podemos ver plasmado este gran trabajo”, enalteció.
Por su parte, el Fotógrafo Jorge Silva Rivera, explicó que el Desierto de la Soledad, es el nombre antiguo de la Selva Lacandona, se lo dieron dos exploradores chiapanecos, Juan Ballinas y Manuel Martínez. “En esta exposición se muestran tres momentos diferentes, sin un orden cronológico exacto, donde cuento la historia de esta selva, sus luchas, que para mí es uno de los grades remanentes de agua. Uno de los más grandes retos que busco en este proyecto, es involucrar a la sociedad en general para valorar los recursos naturales que existen, como en este caso la Selva Lacandona que involucra a varias áreas naturales y que resguardan una de las mayores fuentes de agua y de vida del planeta”.
Señaló que este trabajo es parte de un proyecto realizado con el apoyo del Sistema de Apoyos a la Creación y Proyectos Culturales (SACPC) del programa FONCA, de la Secretaría de Cultura.
“Si bien existe el empeño de grupos y organizaciones que expresan la voluntad de una parte de la sociedad para preservar la vida, es urgente reconocer que la responsabilidad para lograrlo es colectiva y global. La Tierra es nuestra y nuestra es la tarea de conservarla, aunque desde la comodidad de algunas formas de vida consumista nos empeñamos en negarlo. Sin importar donde habitemos, la humanidad toda está en riesgo con la pérdida de selvas y bosques”, manifestó.
Destacó que poder conseguir la
foto soñada que une el alma en armonía con la naturaleza indómita de esta selva, representa un gran desafío. “Hay que poder dedicar tiempo en planificar todo de manera profesional para poder afrontar la realidad en cada expedición, incluso lo imprevisto; armarse con paciencia, internarse a lugares recónditos que, sin asegurar nada, si todo se alinea y ese conocimiento y planificación dan sus frutos, la luz es la idónea y el momento es preciso, podremos conseguir esa gran foto que buscamos”.
Agradeció a todas las Dependencias Gubernamentales, ONGs, artistas, fotógrafos, familiares y amigos que han hecho posible realizar este proyecto, de muy diversas formas. “Un agradecimiento muy especial al Biólogo Javier de la Maza por facilitarme el acceso a las instalaciones de Natura y Ecosistemas Mexicanos en el interior de la Selva y poder permanecer por largos periodos de tiempo en busca de esa foto soñada, la última visita en este año estuve ahí un mes completo. Muchas gracias a todo el personal de Natura Mexicana”.
“Quiero dedicar esta exposición a Guillermo Silva, mi padre fallecido hace 23 años y que el día de hoy me acompaña en este hermoso recinto donde laboró y en donde la obra de su hijo, hoy, está expuesta”, enfatizó emocionado.
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